El alcalde Eduardo Rivera Pérez pactó la paz entre las organizaciones 28 de Octubre y Antorcha Campesina tras el conflicto en el Mercado Amalucan.
El cónclave se realizó a puerta cerrada y se informó de él a través de las redes sociales del presidente municipal de Puebla.
Eduardo River agradeció a Rubén Sánchez Sarabia, “Simitrio” y a Juan Celis Aguirre, dirigentes de las agrupaciones por su presencia y disposición para dialogar.
También vía Twitter, el presidente municipal señaló que la reunión permitió “avanzar en la solución de los problemas”.
La declaración de Eduardo Rivera dejó entrever que quizá llegó a un acuerdo entre ambas organizaciones y el ayuntamiento. Pero que continuarán “trabajando por el bien de Puebla”:
Aprecio y agradezco a Carlos Celis y Rubén Sánchez su disposición al diálogo para avanzar en la solución de los problemas del Mercado Amalucan”.
La reunión entre los líderes de la 28 de Octubre y Antorcha Campesina ocurre después de 12 días del conflicto en el Mercado Amalucan.
El pasado 24 de mayo, un grupo de al menos 20 personas, supuestamente integrantes de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes (UPVA), arribaron al mercado.
A decir de los presentes, esta agrupación agredió a algunos de los locatarios y realizó pintas en las cortinas de los puestos. Lo anterior para exponer que el centro de abasto pertenecía a la “28 de Octubre”.
Pese a que al lugar arribaron elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), trascendió que al menos cuatro personas resultaron lesionadas.
Previo a reunión con líderes, Eduardo Rivera llamó a solucionar conflictos en Mercado Amalucan
El pasado 25 de mayo, el presidente municipal Eduardo Rivera llamó a solucionar los conflictos entre la “28 de Octubre” y locatarios del mercado Amalucan.
Durante su evento matutino, el alcalde señaló que no permitiría ningún tipo de agresión y de registrarse, los responsables serían detenidos y sancionados.
Asimismo, reprochó la situación violenta que se registró, al mencionar que se encontraban en un espacio donde acudían decenas de familias. Provocando no sólo riesgos, sino mala imagen al sitio y con ello bajas ventas.
¿Cómo van a querer ir los ciudadanos a comprar a un mercado?, cuando los propios vendedores se están agrediendo. Es inaceptable la anarquía y el desorden, no le conviene a nadie”.